Este es mi pequeño diario de sentimientos, con el que día a día escribo lo que pienso para poder desahogarme, gracias por leerme. Un beso.

domingo, 22 de julio de 2012

Escupimos palabras, nos tragamos sentimientos.

Por el simple hecho de tener miedo a que nos hagan daño, a ser frágiles ante el resto del mundo, a arriesgarnos a mostrar nuestros sentimientos... Por, simplemente, ser cobardes.

Nunca digas nunca, porque nada es para siempre.

Y dijiste que nunca nos pasaría esto, que lo que sentías duraría siempre, que seguiría siendo la más importante para ti por el resto de la eternidad, pero de eso ya nos queda poco. Que las palabras son vacías sin sentimientos, que los besos ya no sirven sin sentirlos, que esos abrazos en el momento justo se los llevó el viento, y las tardes tumbados en mi cama acurrucados uno con el otro cantándonos tonterías y diciéndonos que nos queríamos no pueden estar más lejos.
Que lo nuestro era para siempre jamás, como los cuentos de princesas, donde no hay sapos, sólo perdices. Que mi príncipe azul ya no mata a mis dragones, ni tampoco espanta mis pesadillas. Que lo único que nos quedan son esos recuerdos que sólo hacen daño, y esas heridas entreabiertas que siguen doliendo como cuchillos.
Y ahora, entre horas y horas de silencio, sólo nos queda el rencor que sentimos el uno por el otro. Que cuando todo acabe, sólo recordaremos los días enteros peleando. Y, para no variar, miles y miles de horas acurrucada en mi cama esperando a que llegues y me abraces, que me digas que me quieres y que todo se arreglará, pero eso nunca pasa. Que cada día que pasa te noto más lejos, y más cerca tu ausencia. Que nunca antes había llegado a pensar en que esto podría llegar a pasarnos, en que la rutina nos atacaría una y otra vez, que nos llegaríamos a odiar, pero como mi madre dice: Nada es para siempre.
Una vez más, sólo me consuela que el tiempo pondrá a cada persona en su lugar, pero la simple idea de pensar de que esto pueda llegar a su fin duele como nunca antes podría haberlo imaginado.

sábado, 18 de febrero de 2012

Nada mejor que la infancia.

Hay situaciones en la vida en las que no sabes qué camino seguir ni con quién seguirlo, piensas que no tienes fuerzas.... O, simplemente, crees que no eres capaz de hacerlo...
Pero, ¿por qué? Párate a pensarlo un segundo, mira a tu alrededor y fíjate en todo lo que sucede.
Los niños chicos en el parque se caen una y otra vez, pero se levantan sin derramar ni una lágrima y siguen corriendo y riendo, hasta que vuelven a caerse y hacen lo mismo: Caerse, levantarse, y seguir luchando por conseguir su propia meta, la felicidad.
Y si un niño de 5 años es capaz de conseguirlo, ¿tú por qué no?
Tú también has sido pequeño/a, te has caído y te has levantado con una sonrisa en la cara, no te has preocupado por lo que la gente de tu alrededor pensara, simplemente lo has hecho, has sido feliz.
¿Por qué no volver a esos tiempos ahora que podemos? Luego será demasiado tarde, y te arrepentirás por no haberlo hecho cuando podías.

Aunque no puedas verme, siempre estaré a tu lado.

Porque sólo cuando te tengo a mi lado soy capaz de pensar que el cielo existe, o que la felicidad está a tan sólo mil y una caricias en tu cuerpo. Que después de dar tres pasos por cada uno de tus lunares y un beso, llegaré a poder avistar la cosa más maravillosa del mundo.
Que, tal vez, después de novecientos noventa y nueve besos, podré que conseguir que no dejes de sonreír ni un sólo segundo.
Pero cómo conseguir todo esto si te tengo tan lejos...

lunes, 30 de enero de 2012

...

Tal vez sea cierto lo que me dijeron una vez, que si sigues forzando lo que está muerto sólo consigues hacerte más daño, y que en el momento en que te paras a pensar en si quieres a alguien, ya has dejado de quererle para siempre...

domingo, 29 de enero de 2012

Mejor tarde que nunca.

Cómo no, ya volvemos a las mismas. A los días donde como tú no eras feliz nadie podía serlo, y te dedicabas a joder vidas. Los días donde ibas inventando mierdas de todo el mundo y así eras feliz, porque como tu vida se derrumbaba a pedazos tenías que encontrar la manera de sentirte mejor, ¿y cómo lo hacías? Jodiendo a los demás, convirtiendo sus vidas en una mierda, inventándote cosas que estabas segura de que les traerían miles de horas de llantos y otros tantos miles de problemas.
Pero así eres tú, una persona a la que todo el mundo cree conocer pero sólo unas pocas personas de verdad saben cómo eres. Una niña chica encerrada en el cuerpo de una "adolescente", una persona muuuuuuuuuy envidiosa además de mentirosa. Una persona dispuesta a romper mil relaciones por tal de sentirse mejor, ya que la suya fue una mierda. Eres de esas personas que dan tanto asco porque sólo sabes ir dando pena por la vida, y que todas las "amigas" que tienes las has conseguido así. Pero luego, cuando te das cuenta de que son realmente felices tienes que ir TÚ a joderles la vida por completo, a destrozar sus momentos más felices, a robarles su FELICIDAD, como ya has hecho tantas veces con nosotras...
Pero ya no. 
Tengo que agradecerte SÓLO UNA COSA, después de 11 años juntas. Y es que gracias a ti me he dado cuenta de lo mala que puede ser la gente, y del mucho daño que te puede hacer alguien si confías en él... Pero eso ya es pasado. Me gustaría no tener que verte día sí y día también, porque no soporto cómo le haces a la gente lo mismo que nos hiciste antes a nosotras, no soporto ver cómo la gente cae en tu trampa una y otra vez.
Lo único que tengo que decirte ahora es... Gracias, por haberme hecho madurar, y también un sincero HASTA SIEMPRE, porque te aseguro que jamás en la vida volverás a escuchar una palabra que vaya dirigida a ti desde mi boca, ni tampoco volveré a hacerte ningún tablón ni ningún estado, hay muchísima gente que se los merece y no pienso malgastarlos contigo.
Y bueno, no tengo nada más que decirte, sólo que ojalá toda la gente se dé cuenta de cómo eres y vaya saliendo a la luz tu personalidad, porque te lo mereces, te mereces lo peor. Y eso nadie lo va a cambiar.

jueves, 19 de enero de 2012

Una vez más, eres tú.

Hay cosas, como el amor, que poca gente entiende. Todo el mundo dice que alejar de tu pareja a las personas que hacen daño a tu relación es un hecho egoísta, pero hablan por hablar... Cuando de verdad quieres a una persona, sólo quieres que todo sea perfecto, que nadie manche tu preciosa e impecable historia de amor con rumores o mentiras, o quitándote lo que más quieres, tu razón de existir, el amor de tu vida, que en mi caso eres tú.
Cuando intentas alejaros a ti y a esa persona tan especial de lo que os daña quitando a esa gente que estorba, todos te gritan que no le quieres, que le alejas de sus "amigos", que le vas a dejar sólo/a... ¿Y qué decir contra eso si sabes que en el fondo llevan razón, que no tienes derecho a hacerlo? ¿Qué hacer cuando siembran en tu mente la semilla de los celos y de la culpa? Llorar, lo único que hago es llorar... Y pensar en qué es lo mejor para ti, si lejos de mi lado vas a tener una mejor vida o si encontrarás a alguien que te haga sonreír más...
¿Y ahora qué? Ya todo está negro, ya han manchado tu maravillosa historia... Ahora sólo hay peleas, gritos y más enfados, llantos sentada en esa esquina de mi habitación que conoce y ha visto todas y cada unas de las lágrimas que he derramado...
¿Y todo por qué? Por ellos, por la gente, que su única intención es joderlo todo, y nosotros como dos tontos ahí, sin quitar todo lo que echa a perder lo nuestro, hasta que casi llega al punto en el que ya nada vale la pena y todo está perdido...
Pero no, cambiamos el chip y somos capaces de apartar la suficiente mierda para poder respirar, y poco a poco conseguimos arreglarlo todo. Pero, para no variar, llega el tiempo de que los "sin vida" aparezcan y vuelvan a hablar. Y luego están esas zorras envidiosas a las que les encanta  sacar mierda y volver a repetir lo mismo que otros ya dijeron: "Te está alejando de tus amigos, te vas a quedar sólo, lo perderás todo y cuando te deje tu vida no tendrá sentido, y entonces querrás volver a nuestro lado, pero ya no estaremos..." ¿Y ellos se hacen llamar amigos? No les entiendo...
Pero ahora sólo nos queda pasar, callar bocas cuando sea necesario y disfrutar del tiempo que pasamos juntos. Que "a palabras necias, oídos sordos", y esa frase nunca antes había tenido tanta razón...
Y si la vida son dos días, yo quiero estar tres a tu lado. Los dos solos, alejados del mundo y de todo lo que nos rodea, porque nunca antes lo había tenido tan claro.
Que te quiero, y el tiempo a tu lado pasa tan rápido como se mueven las alas de un pequeño colibrí, y los minutos sin ti son como siglos y siglos sin ver la luz del Sol...
Porque lo único que quiero es estar el resto de mis días a tu lado, y morir sabiendo que sí conocí a mi alma gemela, que envejecí junto a ella. Y, cómo no, esa persona eres tú...