Este es mi pequeño diario de sentimientos, con el que día a día escribo lo que pienso para poder desahogarme, gracias por leerme. Un beso.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Hola, madurez.

Crecer es darse cuenta que la vida no es como uno quiere, que las cosas hay que ganárselas con esfuerzo y sudor, no con lagrimitas de cocodrilo y falsas promesas. También es intentar dar soluciones a nuestros problemas por nosotros mismo; darle importancia a lo que de verdad la tiene, no a tonterías ni caprichos; aprender a sonreír ante cualquier problema, porque hay que ser feliz pese a todo; reír cuando podamos y llorar cuando lo necesitemos, que llorar no nos hace débiles...
Sin madurez no se va a ningún lado en la vida, nadie en este mundo es perfecto y eso tenemos que aceptarlo, porque lo perfecto llega a ser aburrido.
La vida es MUY corta y no hay que desaprovecharla por nada ni que rendirse ante cualquier dilema que se plante frente a nosotros, tenemos que confiar en nosotros mismos y hacernos a la idea de que siempre habrá algo que nos haga daño y que nos haga estar mal, pero también debemos saber que podremos con ello, porque podemos conseguir lo que nos propongamos, sólo es cuestión de tiempo y esfuerzo.
Cuando era pequeña, cada vez que me caía, mis padres me decían que siempre siempre siempre tenía que levantarme y seguir adelante, porque en la vida me tropezaré y caeré millones de veces, pero pase lo que pase tengo que ponerme de pié y seguir mi camino feliz por haber superado un obstáculo, porque de los errores se aprende y el pasado está para aprender de lo que sucedió, no para atarnos a él y quedar estancados en algo que un día sucedió, y mucho menos debemos sufrir por eso. Yo creo que no debemos arrepentirnos de nada de lo que hemos hecho, porque si lo hicimos fue porque en ese momento queríamos y pensábamos que era lo correcto, o aunque no lo fuera, era lo que sentíamos en ese momento. Y la vida está para eso, para hacer lo que queremos y sentimos, que ya tendremos tiempo para aprender de ello...
Y si la vida te hace llorar y te da mil de motivos para llorar compra pañuelos, sonríe y dale mil y un motivos para sonreír. 
Y sí, todos tenemos derecho a estar mal... Pero, ¿para qué desaprovechar el tiempo llorando si podemos estar riendo, saltando, cantando, bailando y pasándolo bien con nuestros seres queridos, con las personas que nos quieren de verdad?
Tenemos que superarlo TODO, cegar con una enorme sonrisa al que intente hundirnos.
Haz lo que quieras y sientas, que la vida no dura para siempre y no debemos desaprovecharla haciendo lo que quieran que hagamos, sino aprovecharla y disfrutarla al máximo haciendo lo que nosotros queremos.
 

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